Calor, mucha calor. A pesar de salir casi a las 12 de la noche el ambiente es insoportable. Casi 30 grados, y a pesar de todo me encantan estas noches. La luna llena en lo alto del horizonte hace que la noche sea especial, y correr a sus pies es de esas sensaciones difíciles de explicar (llamadme "friki"), al menos para mí. En noches como la de hoy, no hace falta el frontal cuando sales a correr porque puedes ver perfectamente aunque no haya luz, en cuanto el ojo se acostumbra (cosa que sucede en pocos segundos), puedes ver perfectamnte. Como disfruto haciendo lo que más me gusta en estas días, o mejor dicho, noches extremas y en un escenario de pelicula,
El sábado tengo una nueva aventurilla preparada, ya os contaré porque me va a salir un entreno genial de cara a la Matagalls...
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